viernes, 16 de septiembre de 2016

INFANCIA: SACRALIZACIÓN DE LA VIOLENCIA INSTITUIDA

Juan Richar Villacorta Guzmán

INTRODUCCIÓN

El presente trabajo, tiene como ejes centrales de reflexión a tres áreas de la ciencia: Ciencias de Sociales y Religión, elementos de antropología y ciencias de la educación, se tiene la certeza motivacional desde una perspectiva que aproxime a la reflexión no en un campo excluvsivo de lo religioso, sino que se entienda lo religioso desde la dimensión etimológica del volver a ligar o unir.
Con dicha propuesta se realiza un paseo de cuestionamiento de la visión del objeto de estudio, el cual mostrará la relación antropo-religiosa además de la mítica con la temática de la infancia, en un intento de acercamiento socio-histórico crítico del manejo de lo mítico sagrado sustentando en una cultura de la violencia, dicha postura nos lleva a intentar entender una alternativa de lectura hermenúticade los fenómenos sociales y cómo ellos se replican en los proceso educativos.
Se intenta realizar una lectura desde la cultura de lo descartable o de las sociedades líquidas, será en dicha propuesta que vayan emergiendo algunas incertezas invisibilizadas por la sociedad del contentamiento.
En el texto, se podrán encontrar algunas intuiciones de postura amplía y compleja que permitan otra u otras formas de acercamiento al fenómeno en sí desde una línea de acción coincidente con un pensar complejo.
Se pone en conocimiento del lector, que una primera instancia se pensó en una citación in extenso de autores, pero tomando en cuenta que es un texto para lectura amena y provocativa, sólo se añade una bibliografía básica.
Palabras clave:
Infancia, binomio madre niño, sacrificio, violencia instituida
1. El papel de la Infancia en contextos socio-culturales –religiosos
Hablar de la infancia en un triple sentido: religioso, cultural y social, implica una lectura amplía, lo cual es interesante el descubrir, como tras de los imaginarios se van dando pautas de acercamiento entre las distintas etapas de crecimiento con determinados ritos de paso, ellos llevan no sólo a la aceptación por parte del conjunto social con una serie de ritos de paso o de iniciación, ellos tienen determinadas constantes en virtud al contexto sociocultural en el cual se mueven, pasando desde aquellos que son en sentido agrario o de pertenencia a la tierra, como también aquellos ritos ceremoniales institucionales, sin dejar de lado los nuevos ritos de paso en el manejo de determinados artefactos en la sociedad actual.
En un intento de organización, de las ideas, partiremos desde un acercamiento religioso en dos vertientes: la experiencia y la reflexión teórica, para a partir de ellas poder realizar un acercamiento a la dimensión antropológica, sociológica e inclusive económica.
A partir de los años ochenta, me tocó la suerte de tener contacto con la experiencia de los pueblos yungueños, quiénes a su vez llevan dentro de sí la experiencia cultural aymara, en dicho contexto vi que las mujeres tenían muchos hijos, eso comprobé estando en la comunidad de Vila Vila, lejana a unos quince Kilómetros de Irupana, de la Provincia Sud Yungas de La paz, donde me quedé por cinco días en mi primera experiencia de convivencia directa con el área rural, entre las muchas cosas que aprendí, me encontré con que las mujeres no sólo tenían muchos hijos, además que ellas contaban que habían muerto muchos de sus hijos, ya sea en el parto o en los primeros años; todas tenían la experiencia de bebés que habían muerto, cabe resaltar que ese tiempo no existía camino para ir hacía el poblado más cercano, pues todo el camino se hacía por una senda en la cadena montañosa andina, con largas horas que debían realizarse en el día, pues en la noche era “casi imposible”, en base a esa primera experiencia, nacieron muchas preguntas, las respuestas eran variadas, las mismas las iremos presentando a lo largo del texto, pero dejo algunas respuestas interesantes:
Tienen muchos hijos, por que son unos flojos.
Por qué las mujeres no saben cuidarse.
Por el machismo.
Por ignorancia.
Por qué Dios se los ha dado.
Por que es la única certeza de que alguien podrá cuidarme mañana.
De todas las respuestas, la que más me impresionó en mi forma de ser citadino con aires de salvador en una cultura que creía que podía “salvar”, constaté que el problema es que uno debe aprender del contexto antes de emitir prejuicios, de ahí que la última respuesta me pareció interesante, pues una maravillosa mujer yungueña me dijo: “acá debemos tener muchos hijos, pues uno no sabe cuantos van a vivir, o si nosotras vamos a vivir, en caso de que consigan pasar el año o dos años, es que es posible que vivan, pero ya después tienen que irse al pueblo o la ciudad, pocos vuelven, pero los que consiguen quedarse con nosotros, por lo menos nos hacen compañía…”
Año de dos mil y no se cuantos años, parto de esa experiencia que servirá de marco de referencia del presente artículo, donde podemos ver que en el ámbito religioso, existen una serie de elementos que nos permiten acercarnos un poco a la experiencia diferente de la enfermedad y muerte de muchos infantes, sólo se darán pautas, se minimizarán prejuicios, además de tratar de leer desde contextos amplios.
1.1. La experiencia de la muerte y la enfermedad en el contexto bíblico cristiano
En la Biblia nos encontramos con muchos casos de la presencia de niños que esperan pacientemente la muerte o hacen que a ellos les llegue la muerte como es el caso de Ismael, que es hijo de Agar cuando la esposa de Abraham Sara se embaraza y Agar es despedida (Gn 21, 1-12), en dicho texto nos encontramos como Agar espera la muerte del niño a una distancia prudente.
Con ese texto, podemos encontrar elementos en cuanto a la conveniencia o no de que un niño nazca y cuándo “vale la primogenitura”, no haremos un análisis bíblico teológico pues no es la intención del artículo, pero eso sí mostrar la presencia de lo niños y su importancia para la construcción social de la vida y también para la construcción del núcleo central desde el cual se mantiene ciertos arquetipos o “habitus” en cuanto a la presencia de ellos en la sociedad, dicha experiencia la encontramos de manera algunas veces diferente a lo largo de la Biblia, véase el caso de Moisés en el Éxodo, pasando con la muerte de los primogénitos en la huida de Egipto, en el Antiguo Testamento, elementos que nos permiten visualizar la muerte de una generación, más también el mantenimiento de la misma de maneras no convencionales.
Otro elemento que podemos relacionar desde una lectura diferente es el referido a la circuncisión de los niños (Ex 12,3), elemento que lleva tras de sí un control social de las enfermedades, pues no sólo podemos quedarnos con el “mandato divino” sino que hay tras el mandato divino, ello nos lleva a entender el criterio de salud y cuidado de la vida que es presentada por el hagiógrafo como voluntad divina, elemento que da mayor valor al texto sagrado.
Nos encontramos también la muerte de los primogénitos en Éxodo 11,5ss, lo cual nos muestra la importancia de la primera generación o las implicancias de la muerte de los hijos a lo largo de la Historia Sagrada en particular y en una serie de expresiones desde lo religioso.
En el Nuevo Testamento, la historia más famosa es la matanza de los niños por parte de Herodes (Mt 2, 16-18), que hasta nuestros días se habla de la “fiesta de inocentes” principalmente en el área de de habla hispana , en cuanto a dichos elementos podemos realizar una revisión desde distintas posturas teológicas, las cuales incluyan propuestas antropológicas y sociológicas, desde las cuales podemos ver que la implicación de perder al hijo menor de dos años puede llevar a un conformismo, a una “aceptación de voluntad divina, a una rebeldía o a una justificación sacrificial desde distintas percepciones de lo sagrado.
Desde la perspectiva enunciada, vemos la propuesta desde una postura de lo sagrado, la cual nos permite una probable amplitud de análisis en cuanto a la muerte de los niños.
1.2. Historias y mitos en torno a la muerte de los niños
A lo largo de la historia nos encontramos con sacrificios de niños, los cuales nos muestran la necesidad de satisfactores ante lo “no comprensible”, algunos en el lenguaje cotidiano hablan de la “ignorancia” del pueblo, punto de vista acertado, en tanto y en cuanto podamos ver el derecho a la vida, pero no podemos dejar de lado, cosmovisiones diferentes, no para justificar, sino para minimizar juicios anacrónicos, con dicha postura no se está justificando, más bien queremos crear una apertura.
Desde la mitología griega, tenemos el famoso mito de Edipo Rey, cuya autoría se le atribuye a Sófocles, desde el cuál llegamos al hecho inverso, ya que al no darse el sacrificio las consecuencias son nefastas.
En base a dicho mito se han construido una serie de propuestas que llegan hasta el mito de Edipo, tema que nos puede llevar a la necesidad del sacrificio hasta lo último, caso contrario se caen en respuestas no apropiadas para aquellos que no cumplen.
En América Latina, principalmente en México tenemos la muerte de los niños como ofrenda a sus entes superiores.
“La costumbre de sacrificios humanos en honor al dios Tláloc es originaria de la cuenca de México. Los niños era elegidos de acuerdo con características físicas especiales, como la presencia de un remolino en el pelo, o por ser especialmente llorones, lo que, según los antiguos, prometía la llegada de lluvias”.
Dicho texto hace referencia a la cultura tolteca, lo cual muestra que dichos sacrificios no eran ajenos a distintos ámbitos de las culturas latinoamericanas, además de varios contextos de nuestro planeta.
El P. Eleazar Lopez en una Conferencia en torno al año 1992 a cuyo texto mimeografiado tuve acceso indicaba: “las mujeres en el tiempo de la colonia algunas se provocaban el aborto, otras se suicidaban, algunas los ahorcaban con el cordón umbilical, otras los arrojaban de las peñas para que no sean pongos, otras simplemente los abandonaban” (Texto no publicado).
Al acercamos a la experiencia de la muerte de los niños, se puede ver que tienen un cierto halo de sacrificialidad, lo cual nos puede llevar a una visión eminentemente religiosa, razón por la cual entenderemos que todo sacrificio pasa por lo sagrado, lo cual será entonces potestad de los que manejan lo sagrado para la elección y designio del elegido u elegida.
Es ahí dónde queremos mandar una primera cuestionante, tras de lo religioso, que otro tipo de justificaciones se encuentran, cómo se integra los social, lo político, lo económico y lo cultural, será que es mera coincidencia o es que tras de la aparente sacralización lo menos importante es lo sagrado, sino el “bienestar de determinados grupos de poder”?
Las preguntas nos llevan a descubrir junto a Franz Hinkelammert cual la característica del sacrificio de los primogénitos y cómo ellos justifican la muerte del inocente, es cierto que a lo largo de la historia se fue mostrando ejes de reflexión que pasan principalmente por lo meramente sagrado, hasta el sentido socio-económico que intenta justificar o minimizar la violencia en lo sagrado, tema que iremos profundizando desde la propuesta de Girard.
Hasta acá sólo hemos presentado la presencia de la muerte en culturas originarias y posiblemente en las mal llamadas “salvajes”, pero esto no es ajeno a las distintas etapas de la sociedad, las cuales hoy se puede disfrazar de diferente manera, más son sacrificios que provocan la muerte de niños y niñas.
Las culturas originarias, normalmente desde su percepción: muerte, enfermedad y vida, van uniendo justificaciones, las cuales emergen por ritos de paso, además de una serie de procesos de purificación, antes de que ellos sean asumidos por la comunidad, hagamos una pequeña síntesis, no con el afán de mostrar a detalle, sino para ir develando la experiencia de los procesos de inserción y reflexión desde los puntos enunciados con anterioridad en relación a la muerte y enfermedad.
Desde nuestra cultura boliviana y en Cochabamba, existe la experiencia de llamar el “ánimo” o “su almita” técnica que es usada cuando el niño se asusta, entonces con una ropa suya se le pide que vuelva su fuerza vital, ya que el bebé sólo anda llorando.
Otra experiencia bonita es cuando se traspasa la fuerza vital al niño, es cuando se enferma y los padres o familiares le pasan el aliento a su niños, eso puede ser mediante caricias o besos, pues de esa en una manera se va llamando manteniendo el calor en el cuerpecito.
Será desde dicha experiencia que nos vamos acercando a las implicaciones de la enfermedad, la cual en un intento de integración de la propuesta de los pueblos yungueños, además del pequeño acercamiento a la experiencia de lo sagrado, se podrá visualizar que entre lo natural, la crítica, y la postura de acompañamiento o condena a la enfermedad, para eso dependerá el lugar desde el cual nos acercamos, pues para algunos la enfermedad implicará un alto en la cotidianidad, eso necesariamente lleva a momentos de ruptura, es decir, se quiebra el ritmo vital el cual desde una experiencia urbana implica un acercamiento desde el conocimiento “científico de la ciencia médica” recurriendo a momentos de aislamiento, de medicación o de determinados procesos de sanación.
En sociedades agrarias, donde lo mítico sagrado se une, esos momentos de ruptura llevan también a momentos de ritos de paso y/o transición para a partir de ellos tratar de visualizar por medio de la naturaleza, de algunos signos externos como por ejemplo ver el amanecer para identificar la causa del mal, es así que siguiendo a Bourdieu podríamos decir:
“Los principios de funcionamiento de los campos son asimilados por los sujetos a través de procesos complejos de socialización que hacen de estos espacios estructuras estructurantes” (Bourdieu 200,133)
Un campo se define, entre otras formas, definiendo aquello que esta en juego y los intereses específicos, que son irreductibles a lo que se encuentra en juego en otros campos o a sus intereses propios (no será posible atraer a un filosofo con lo que es motivo de disputa entre geógrafos) y que no percibirá alguien que no haya sido construido para entrar en ese campo (cada categoría de intereses implica indiferencia hacia otros intereses, otras inversiones, que serán percibidos como absurdos, irracionales, o sublimes y desinteresados). Para que funcione un campo, es necesario que haya algo en juego y gente dispuesta a jugar, que este dotada de los habitus que implican el conocimiento y reconocimiento de las leyes inmanentes al juego... (Bourdieu 1990:136).
2. Una lectura desde parámetros bíblico-mítico-sociales de la infancia
En una relectura desde una postura socio-antropo-económica y con herramientas de tres textos básicos: La fe de Abraham y el Edipo Occidental (Hinkelammert, 1989), junto a los libros de Girard: La violencia y lo sagrado (Girard, La Violencia y lo Sagrado, 1995), además de El Chivo expiatorio (Girard, 1986), textos que fueron un aporte a la lectura crítica desde América Latina.
Tal aproximación tiene dentro de si elementos de la Escuela de Frankfurt con sus tres vertientes importantes: psicoanálisis, economía y sociología, esto elementos que se hallan enriquecidos con una lectura antropológica sustentada en un cuestionamiento a la teoría sacrificial.
Si bien es cierto que Girard ya nos aproxima de manera diferente al fenómeno del sacrificio desde sus dos obras, es interesante también descubrir el texto la Fiesta en honor de Yahvé (Maertens, 1964), en un intento de entender las distintas fiestas o celebraciones en busca de equilibrio en la relación individuo - naturaleza –cosmos.
A lo largo de la historia, se puede percibir que las distintas fiestas tienen una relación con el contexto geográfico en el cual se desarrollan y estos a su vez van creando una serie de signos, símbolos los cuales marcan la esencia de la percepción de vida además de las distintas etapas del proceso vital.
Es en dicha acepción que podemos descubrir que las fiestas también tienen dentro de si una serie de ofrendas las cuales pasan desde la ofrenda de productos, llegando en algunas culturas a la ofrenda de seres vivos, los cuales buscan agradar y minimizar los efectos de la naturaleza en una percepción mágico mítica.
Ya volviendo a la razón de ser del texto, en una aproximación a la obra de Hinkelammert, se encuentra una lectura diferente Isaac (Gn 22, 1ss), quien en resumen nos presenta desde una lectura diferente a la del texto bíblico que era costumbre en las sociedades antiguas el sacrificio del primogénito, lo cual era aceptado y considerado normal, de ahí que Abraham ve el sacrificio de su hijo como algo agradable a la divinidad, más desde esa nueva lectura propuesta por Hinkelammert, podemos decir con el autor:
Al ser libre, Abraham es soberano frente a la ley. El juzga sobre la ley, y el Angel le pide reivindicar esta libertad. A Abraham la obediencia lo hace libre, porque lo que se le pide, es ser libre. Esta libertad la afirma al no matar a su hijo y al enfrentar toda su sociedad, toda su cultura. Esta libertad es su fe. La fe de Abraham, por tanto, está en no haber matado a su hijo. La inversión de la historia del sacrificio, en cambio, ubica la fe de Abraham en su disposición y su buena voluntad de matarlo. (Hinkelammert, 1989) p. 10
Llegamos con tal afirmación a una nueva forma de entender la libertad, no se trata de discutir o no la presencia de la divinidad, ya que no estamos en Ciencias de la Religión, sino ante todo el descubrir como la negación a la muerte sacrificial del inocente muestra una ruptura con la visión occidental de la muerte como el justificativo necesarios para el mantenimiento ad eternum de posturas que justifican la violencia, con esa nueva lectura nos encontramos con la libertad a favor de la vida, no la del arbitrario que quiere imponer su punto de vista y desde allá atribuirse posturas de violencia institucionalizada o justificada en aras de un aparente bien mayor.
Dicha imagen nos lleva a entender que en muchas sociedades la muerte y el sacrificio se halla justificado y es fundamental la obediencia para mantener al grupo, pues el aparente bienestar del grupo no permite disidencia ni pensamientos divergentes, pues todo aquel que cuestiona deberá ser marginada, acá nos encontramos con una postura de Abraham que al revelarse a la muerte de su hijo, irá contracorriente del sistema establecido, pues la difidencia lleva a la ruptura con el grupo, entonces nadie puede ser motivo de difidencia en un grupo establecido.
El tema de Isaac podría ampliarse a otros textos sagrados, pero sólo queremos dar un salto en razón de aproximarnos a la visión de cómo desde lo sagrado nos encontramos con la necesidad de respuestas sacralizadas y justificadoras del sufrimiento: ya sabemos que existen muchos más ejemplos, en el Nuevo Testamento nos encontramos con la muerte de los niños, más también con la famosa pregunta: quién pecó, sus padres o…..
La muerte, la enfermedad, la violencia necesita de una autosatisfacción que permita la minimización de identificación de los factores internos y externos en torno a la violencia institucionalizada, lo cual tendrá un mayor grado de validez si se identifica al origen del pecado, o si se consigue que el pecador o alguien de su entorno pague las osadías y atrevimientos de quien se permitió opinar en libertad.
Entonces en los textos sagrados y particularmente en la Biblia encontraremos el elemento de la justificación por medio del “re-ligar” (volver a unir) con relación a la tensión entre vida-enfermedad - muerte, desde una aproximación sacralizada, dicha visión todavía subsiste no sólo en sociedades nómadas o agrarias, sino en muchas de las mal llamadas civilizadas.
Es decir que desde la experiencia bíblica en una lectura diferente, nos encontramos con las respuestas como aquellas presentadas desde la experiencia yungueña.
La experiencia mítico social desde un acercamiento del sacrificio o la cultura de la muerte del inocente nos puede llevar más allá de nuestras fronteras, para ver las nuevas sacralizaciones, más recordemos al niño sirio Aylan kurdi que en septiembre de 2015 fue encontrado muerto en las playas de Turquía, la ventana hacía la preciada entrada en la Unión Europea. (AFP, 2015), podemos seguir con otros ejemplos, los niños que no tienen acceso a la salud, basta mirar las calles y ver madres con sus niños por las calles vendiendo pequeñas cosas o aquellos que van en la espalda, desde esa experiencia nos acercamos a la experiencia de la sacralización de la violencia, es decir, la certeza desde la cual hay “niños que deben morir” lo cual nos lleva a la naturalización de la muerte, es decir la certeza de que la muerte de los infantes, su acercamiento a la enfermedad nos parecen de los más normal.
3. La infancia como chivo expiatorio
Entremos en la obra de Girard, El Chivo Expiatorio, ahí encontraremos que a lo largo de la historia el ser humano fue buscando satisfacer a sus entes sagrados, sean estos desde una acepción religiosa o una postura sociopolítica la presencia de entes que satisfagan a sus entes divinos o divinizados, de tal manera que ellos permitan “la nueva paz” pues como dicen en su lenguaje popular los pueblos aymarás: “así siempre es.
Dicha percepción no sólo se da en el ámbito de lo sagrado, sino que ella se va manifestando en lo cotidiano, donde la infancia asume posturas de chivo expiatorio el cual de alguna manera llega a ser la única alternativa posible de cierta seguridad ante lo aparentemente inexplicable, pero que también se lleva al lenguaje de lo sagrado, para desde allá poder presentar la validez de posturas, donde la infancia es manipulada para intereses meramente personales o sectoriales, es decir, serán ellos los que aparezcan mostrando que la validez de su presencia puede otorgar la seguridad ad infinitum de sus interlocutores.
Pero veamos algunos ejemplos cotidianos donde los niños se convierten en “chivos expiatorios”:
Por motivo de embarazo.
Por motivo de enfermedad
Por motivo de muerte
Por motivos políticos de manipulación.
Por simplemente ser niños.
Una norma peligrosa, es el “asegurar” al niño, razón por la cual todo aquello que implique la certeza de la vida personal se la auto justifica desde la presencia de un niño, es decir el hecho del embarazo se convierte en “mera obligación” y no en principio de corresponsabilidad, entonces elementos como el aseo, la alimentación la salud, además de otras necesidades si bien corresponden al neonato también se convierten en motivo de manipulación y ante todo de justificación de distintos tipos de violencia, desde la llamada directa, hasta la indirecta, existen afirmaciones dolorosas como: “si no hubiese sido por ti yo estaría…”, “la culpa de todo la tienes tu..” dichas afirmaciones, hacen del niño una carga no sólo para su entorno, sino para él mismo, pues tendrá que enfrentar y guardar dichas percepciones como parte de su caminar cotidiano a lo largo de su vida.
Cuando un niño nace con enfermedad, se debe buscar al culpable, cuando no se puede llegar pese a una serie de cosmovisiones familiares y sociales, entonces se hace necesario el ver que ya sea en la raíz familiar se tiene alguien que “no se portó bien” será desde dicha percepción que el niño es marginado o arrinconado en espacios donde pocos tienen acceso, de ahí que se puede entender la ZDP (Zona de Desarrollo Próximo) de Vigotsky, pues muchos no tienen la posibilidad de acceder a dicha zona.
Entre los muchos casos que me tocó seguir existen dos contradictorios,  uno de un catequista yungueño que ante la muerte en el momento de parto de su mujer, él quedó con cuatro hijos, mucha gente quiso quitarle sus bebes, como también emitir una serie de comentarios, pero él asumió la paternidad plena, cuidaba y caminaba con sus hijos, de ahí que fue un modelo de cómo se puede superar los juicios y prejuicios.
En contraposición, en otra familia, el nacimiento del hijo trajo la muerte de la madre, eran momentos fuertes en cuanto a la atención primaria del binomio madre-niño, fue un año duro para el padre pues ambas familias se negaron a entender y echaban la culpa al bebé de la muerte, el cuadro se remató cuando el padre muere poco después del año del bebé, las familias no querían aceptar al bebé por considerar que el niño tenía “alguna maldición”, trabajo difícil mucho más cuando la comunidad también participaba de dicho parecer.
Los motivos políticos tienen que ver con todo el entorno en cuanto al embarazo y la tenencia de hijos, cuando programas y ONGs parte de la premisa de una educación sexual y reproductiva, la cual no toma en cuenta el entorno en el cual desarrollan su labor educativa, pues si bien los contenidos y continentes son muy valiosos, debe tomarse en cuenta que mucha gente proviene de percepciones distintas de mundo y sociedad, de ahí que muchas veces eso en la violencia intrafamiliar la cual lastimosamente tiene como receptáculo final a los niños, quienes asumirá distintos tipos de violencia.
Es cierto que avanzamos mucho en cuanto a los derechos de los niños y ellos conocen, pero también se debe reconocer, que el simple hecho de ser niños lleva consigo elementos de violencia directa e indirecta en distintos estratos de la sociedad, de ahí el incremento de distintos tipos de violencia, la cual puede provenir de la familia, del barrio o de sectores donde llegan a asentarse, en las ciudades como Cochabamba en Bolivia tenemos a los niños de la calle llamados comúnmente como “polillas”, quienes sufren distinto tipo de violencia, mucho más si tomamos que son entre tercera y cuarta generación de niños que nacieron en situación de calle, entonces para ellos la violencia e inclusive la muerte llega a ser algo muy natural, eso implica que muchos pasen como meros anónimos de la historia.
4. Hacía una relectura desmitificadora de los mitos que justifican la muerte del inocente
En un intento de triangulación desde nuestros autores, se puede ver que tras el grito mimético de la violencia institucionalizada, donde podremos ver que se van creando mitos que justifican la muerte del inocente.
Dichas muertes no sólo están dados por la violencia directa, la cual se ha incrementado de manera exponencial, ella está dirigida a niños y madres, pero también a todo el entorno social, ejemplos son muchos, pero vayamos a los más conocidos y claros que nos permiten visualizar las distintas formas de muerte y violencia institucionalizada.
La muerte provocada por la poca inversión en recursos básicos de salubridad, ello implica agua potable, alcantarillado y arreglo de calles, eso si bien tiene un incremento en los datos del INE su significancia es relativa, puesto que las muertes y las enfermedades tienen su incremento y además debido a problemas climáticos como el del Niño, sin dejar de lado la desforestación y la carencia de políticas serias de inversión a largo plazo nos encontramos con altas tasas de morbilidad y presencia de enfermedades.
Es cierto que en el país se creó el bono Juana Azurduy con el fin de cuidar del binomio madre niño, pero también debemos tener la certeza de que la relación de incremento de mejores en los hospitales de distinto nivel no responde a las expectativas del crecimiento demográfico de la población, de ahí que es un tema que debe ser menos hablado por las distintas instancias político sociales y asumido con mayor responsabilidad.
El nuevo fenómeno del incremento de la mano de obra femenina (no se crítica) muestra en sectores más vilipendiados que ellos llevarán consigo el estigma de enfrentarse con distintos tipos de violencia directa o mimética, de ahí que en dicho sector el sacrificio de los inocentes no sólo se dará de manera directa, sino que conlleva una serie de posturas de justificación de la violencia institucionalizada. Entre dichas posturas se puede mencionar el hecho de negar la corresponsabilidad de cuidado con los hijos, además de la posibilidad de entender por parte del entorno familiar que no toda la responsabilidad es de la mujer.
Los tres ejes presentados, nos permiten también hacer otra lectura de la muerte o violencia hacía el inocente, ya habíamos reflexionado en torno a la presencia de los distintos tipos de sacrificios, lo que se quiere mostrar de la mano de Girard y en una aproximación crítica reflexiva de las experiencias de lo sagrado, cómo la experiencia de lo mimético hacía distintos tipos de violencia desde distintos ángulos sin lugar a dudas tiene una gran aceptación, mucho más cuando ellas se presentan de la forma más natural, pues desde el imaginario local y mítico sagrado se muestra la necesidad y eficacia de dichos actos que son contenidos y continente de la violencia institucionalizada.
Será en una relectura de la experiencia de los niños asesinados por los Herodes de hoy, quiénes no aceptan la aparición de ningún mito fundante que se desarrolla las violencias directas e indirectas, pues desde una sociedad que se precia de ser más humana, encontramos la violencia institucionalizada, la cual si bien por los datos numéricos nos muestran una disminución de la muerte y un mayor acceso a la salud por parte del binomio madre niño, aún en cantidades muy altas encontramos tanto a la muerte, como a la enfermedad y otros tipos de violencia hacía los niños, la lista es larga, pero la discriminación, el poco acceso a la medicina, una educación con fuertes tintes de mediocridad garantizan unas nuevas generaciones con pocas esperanzas de acceso no violento a las siguientes etapas de la vida.
No podemos dejar de lado, el uso de los niños en actividades nada éticas como el contrabando y el narcotráfico temas que si bien son un tema que requieren otra investigación, se puede indicar que la convivencia directa con dicha problemática determinará la adquisición de determinados hábitos en las nuevas generaciones las cuales tendrán una confusión ético política cotidiana, limitando las posibilidades no sólo de ellos, sino también del entorno con el cual se enfrentarán cotidianamente.
Es en virtud a lo anterior, que se hace necesario una visión más allá de la triangulación Girard, Biblia y sacrificios, para llevar adelante una pequeña cuestionante en cuanto a posibilidad de inmersión e inserción del lenguajear de violencia instituida, muchas veces asimilada como elementos de un sagrado imaginario que justifica una violencia hacía los más débiles desde posturas mercantilistas manejadas por instituciones estatales o para estatales.
5. La inocencia mitificada en la cultura descartable.
Hablar de la infancia implica revisar muchos textos dónde uno pasa desde la cuestión de edad, hasta frases tan interesantes que llaman la atención a generaciones y generaciones de seres humanos, una que siempre llamó mi atención es: “ustedes son el futuro del país”.
Si a eso le agregamos el famoso día del niño, de la mujer…. Podemos quedar horas intensas de heteroreflexión institucionalizada, más como la razón de ser del texto es ante todo el cuestionarnos mutuamente, no sólo con los datos que manejan exitosamente muchos autores, sino ante todo comenzar a delinear algunos derroteros de co-cuestionamiento que limite la propuesta de la cultura de lo descartable o Kleenex, término acuñado por Gilles Lipovetsky podremos descubrir como se va manifestando una cultura de lo inmediato donde temas cruciales son manejados desde posturas endógenas para justificar propuestas macroplíticas y visiones de la sociedad del contentamiento.
No se quiere caer en una mera crítica no sustentada o de la simple cultura del mendigo, sino mostrar que los mitos de la cultura de lo inmediato no van permitiendo ver con seriedad el cuidado de la vida como elemento central del derecho a una vida digna para todos.
No podemos negar que desde un ámbito economicista que los recursos son limitados y las soluciones implican una visión amplía y compleja, pero también se debe asumir que las nuevas mimesis nos llevan a una serie de respuestas donde el derecho a vivir de manera coherente y consecuente llegan a un segundo nivel, pues el primero es el cuidado de las sociedades del consumo total incrementando el acceso a los beneficios de aquellos que tienen mayor poder adquisitivo.
Los elementos como economía, salud, educación son banderas enarboladas en mástiles de poca visibilidad en medio de la bruma cotidiana de la aparente intensidad de la satisfacción personal en desmedro de una gran mayoría, se puede recurrir a concursos, a tener mayor cantidad de canchas deportivas, pero no a una inversión seria en alimentación, salud y vida digna.
Tales palabras que no pueden quedar en el mero tintero ideologizado de los detentores del poder, hace que los intelectuales orgánicos simplemente quedemos como meros funcionarios de una clase ociosa que tiene miedo a salir a los atrios de los templos del mal llamado saber cotidiano incrementando desde ese punto de vista la cultura de aparentes arquetipos poco sustentados a favor de nuestros niños.
Se debe necesariamente replantear los conceptos básicos de cuidado, continuidad y certeza de acompañamiento no sólo desde los que pueden, sino de esa ZDP (Zona de Desarrollo Próximo) como lo expresa Vygotsky para convertirlas en reales ZDP1 Zonas de Desarrollo Potencial, eso implica un mirar y hacer posible la expresión de Maltus con su propuesta básica de Ventajas Comparativas acordes al contexto en el cual se desarrollan nuestras infancias creativas.
Por último, si bien es característica del ser humano la posibilidad de interacción entre deseos y necesidad, se considera de imperante actualidad el llevar el discurso a políticas macrosociales que puedan minimizar la muerte de los inocentes e incrementar el deseo mimético positivo y progresivo, eso nos lleva a la posibilidad de hacer realidad el sentido de cuidado del fin de las certezas que tan idealistamente podemos proponer.
6. Reflexiones del final o comienzo de camino
Es cierto que hasta acá probablemente nos movimos en posibilidades utópicas e inclusive ucrónicas para nuestro binomio básico, pero considero que si no somos capaces de tomarlos críticamente, será la violencia mimética la que gane la batalla, pues unos cuantos podrán lucir unas nuevas generaciones en aparente completa realización, pero sin lugar a dudas se incrementará la muerte y migración de cantidades de niños en la incerteza de una base mínima de identidad planetaria.
Intentemos siete principios básicos, como sugerencia no como respuesta, usted amable lector podrá ampliar o minimizar estos desafíos:
Cuidado del cuerpo y de la vida
Mucho se habla del derecho a la libre elección, poco se habla de las condiciones del cuidado del cuerpo y de la vida, se debe replantear el concepto de corporeidad es decir entender que el ser humano en general y el binomio madre niño, son lo más importante, eso implica un cuidado básico de todo lo cotidiano que tenga que ver con ellos, eso significa que cada uno de nosotros debe asumir responsablemente
Mayor inversión en salud
Hablar de mayor inversión en saludo para el binomio madre niño, no solamente es comprar más medicinas o mayor número de médicos, es comenzar seriamente una política proactiva en salud, es el asumir a la previsión como elemento central del derecho a la vida en medio de una sociedad acostumbrada a vivir con una salud requebrajada, para a partir de los síntomas encontrar paliativos. Si en verdad queremos cuidar de la vida, el fltro pasa por el cuidado preventivo así los hospitales serán la última instancia y no la primera, además que podremos equiparlos de mejor manera y para menor tiempo.
Educación para la vida
Que significa “ser persona educada” la discusión nos puede llevar a largas discusiones, que pasa desde libros leídos, obras realizadas, títuos adquiridos y muchas otras cosas más. Simplemente considero que si hacemos del niño (infante) una persona que se pregunta, una persona sagradamente curiosa y que desde su experiencia de vida mantenemos su creatividad, habremos dado un pequeño paso a la ruptura con la comodidad, así no sólo pensará en la selva de cemento como alternativa o en la huída del campo como solución, sino que sabrá integrar la escuela, la familia y su forma de respuesta como un continúo aprendizaje.
Nueva ecología en la relación naturaleza-madre-niño
Lo ético político repeta opciones personales, religiosas, culturales en medio del caosmos, eso implica una ética integral, complementaria y divergente dónde la relación con el otro, la cotidianidad y la vida se da por que soy parte de ésta casa común, todos debemos asumir nuestras diferencias y pertenencias a la casa común y desde allá poder entender, enseñar y compartir el derecho a una corporeidad contemplativa y contemplante.
Políticas de inclusión.
Hoy en día la palabra inclusión es una de las más usadas, pero desde nuestra propuesta, se sugiere que en el cotidiano caminar se tome en cuenta el eje del binomio no como bandera o como mero enunciado, sino como la certeza de que en los distintos campos de la acción y reflexión se asuma criterios serios de participación, cuestionamiento no sólo que den solución, sino que trabaje también el elemnto prevención, de tal manera que se minimice efectos no intencionales como la marginación y la negación de dicha problemática.
Inclusión de lo sagrado de la vida
No se deb dudar que la relación con la vida pasa por el elemento “religar” no como institución religiosa, aún cuando no niega la resencia de ella, pero eso si nos motiva a superar la cultura de la teología del sufrimiento y del sacrificio o del fantasma de la violencia directa o indirecta para todos aquellos que quebrantaron un aparente saber universal estático, incluir lo sagrado de la vida es el cuidado desde el momento de su inserción en otro ser hasta la llegada del mismo, pero es mucho más importante el aprender a cuidar de la vida como un acto del prver antes que del lamentar la muerte del inocente.
Ambientes ecodinámicos
Vivimos una sociedad de derechos, el grito de lo “Ético-político” implica asumir que hay distintas visiones en torno al binomio reflexionado, en caso de haber culturas que justifican la muerte del incente, no se debe caer en una mera condena o aceptación, se debe tomar en cuenta que un mal trabajo con ellos los costos e indirectos para familias, grupos sociales y el Estado mismo son mayores, pues una población que sufrió violencia de manera directa o indirecta los costos serán mayores y en muchos casos irreversibles en cuanto a efectos de violencia estructurada.
Bibliografía
Bibliography
AFP, A. (Miércoles de Septiembre de 2015). Quien era Aylan Kurdi, el chico sirio que aparecio muerto en una playa. La Nacion .
Girard, R. (1986). El Chivo Expiatorio. Barcelona, España.
Girard, R. (1995). La Violencia y lo Sagrado (2ª edición ed.). (J. Jordá, Trad.) Barcelona, España.
Hinkelammert, J. F. (1989). La fe de Abraham y el Edipo Occidental. (DEI, Ed.) San José, Costa Rica.
Maertens, T. (1964). Fiesta en honor de Yahvé. Madrid, España.


¿Lo abyecto normal? 
¿O la normal abyección?

César Maldonado Sanabria

La abyección parece haberse convertido en la natural manera de ser en Latinoamérica. Escritores como García Márquez (1981), Paz (1990) y Vargas Llosa,  premios Nobel de literatura representan a Latinoamérica por la narración de situaciones , de personajes y objetos abyectos. García Márquez describe a Sierva María de Todos los Ángeles, María Mandinga en boca de la niña como un sujeto anormal y una adolescente que necesita ser resuelta mediante la religión, el exorcismo y la superstición. La abyección, en vez de ser una situación incómoda y anormal se ha convertido en la manera normal de ser y de aparecer, la manera de ser saludable; en cambio, la búsqueda de la felicidad parece haberse convertido en anormal. El trabajo analiza obras de Da Cunha, García Márquez, Vargas Llosa y Sáenz hacen de las situaciones de humillación, bajeza y las situaciones inusuales temas de sus famosos argumentos. Con esas narraciones se hacen famosos y con esas narraciones de abyección representan a América Latina, captada por los consumidores de sus literaturas, como situaciones normales.

Palabras clave:
Abyección. Representación Literaria. Salud Integral del niño. Maneras Colectivas de ser.
.... LA CIENCIA TIENE SEXO?

http://www.oei.es/historico/divulgacioncientifica/?La-ciencia-tiene-sexo-estudio-sobre-actitudes-e-intereses-en-la-ciencia-por
Las neurociencias
Retos y desafíos para Bolivia

César Roberto Flores Torrejón

Los últimos estudios del cerebro y su estrecha relación con el comportamiento humano, suponen un nuevo abordaje del estudio de las variables implicadas en los procesos de neurodesarrollo y sus patologías, aspectos que en Bolivia van alcanzando mayor interés en su conocimiento porque éstos tendrán un gran beneficio en la Psicología, la Educación  y el ámbito de la salud mental y pública en general.
El aporte que las neurociencias pueden proporcionar a estas disciplinas radica en los siguientes aspectos que se deben investigar y desarrollar con mayor detalle:
Los nuevos abordajes del aprendizaje y los procesos neurobiológicos implicados.
El cambio en los modelos de explicación desde las neurociencias en los procesos cognitivos, afectivos y comportamentales.
El papel de la emociones y la inteligencia emocional en el bienestar general de las personas.
La comprensión de los beneficios de la plasticidad cerebral en la educación.
El aporte de las técnicas de neuroimagen para entender el funcionamiento del cerebro.
La responsabilidad de nuestro cerebro en el manejo de nuestro comportamiento humano.
Por ello, las neurociencias deben estar acompañadas en el ámbito de la Psicología en particular con investigaciones científicas publicadas basadas en la evidencia empírica y con sustentabilidad comprobada.
Una contribución importante en el ámbito del estudio de las estrategias cognitivas y metacognitivas de aprendizaje como un elemento conjugador de todos estos tópicos expuestos anteriormente, es la investigación sobre esta temática desarrollada en mi Tesis Doctoral sobre las estrategias de aprendizaje en universitarios.
Siendo el aprendizaje definido como un cambio, relativamente permanente, de conducta que se produce como resultado de la práctica. En el contexto universitario implica siempre la adquisición de conocimientos y construcción de significados (Escanero, 2008).
La tarea principal que lleva a cabo el estudiante es, en sentido amplio, aprender antes, durante y después de participar en las distintas actividades universitarias. Sin embargo, las tareas académico/universitarias que ocupan más tiempo a los alumnos son sus propias actividades de estudio que implican autorregulación y ajuste conductual a una situación específica de actividad académica de carácter cognitivo, metacognitivo, frecuentemente individual e interactiva, organizada, estructurada e intencional, intensiva, autorregulada y basada casi siempre, en unos materiales escritos, en un texto (Escanero et al., 2013a) y que, además, crea expectativas, automotivación, genera autoconceptos y supone siempre un esfuerzo personal.
El propósito del estudio de la tesis fue explorar las estrategias de aprendizaje en los universitarios y su relación  con el razonamiento verbal, razonamiento matemático y la solución de problemas. Para ello se tomaron varios instrumentos: estrategias de aprendizaje cognitivas y metacognitivas, razonamiento verbal, razonamiento matemático, rendimiento académico y resolución de problemas.
Entre las conclusiones importantes llegadas en la tesis, se mencionan las siguientes:
a). Los estudiantes que tienen el mayor Rendimiento Académico, son aquellos que tienen los mayores puntajes en las pruebas de Razonamiento Verbal. Respecto al Razonamiento Matemático, el comportamiento es indistinto en cualquier estudiante.
b). La Actitud y la Motivación como estrategias cognitivas de aprendizaje son los dos motores fundamentales que están, del mismo modo, directamente relacionados con las variables Razonamiento Verbal y Razonamiento Matemático.
c). Existe una asociación directa entre Altos Rendimientos (académico, verbal y matemático) y las estrategias de Actitud, Selección de Ideas Principales, Procesamiento de la Información, Estrategias de Prueba, Concentración y Motivación como variables estrechamente vinculadas.
Más allá de estas conclusiones, es preciso hacer énfasis en una “Neuroeducación”. La Neuroeducación se define como la disciplina o transdisciplina que promueve una mayor integración de las ciencias psicológicas y educativas con aquellas que se ocupan del desarrollo neuropsicológico, esta idea surge de que en la sociedad tendrá un dramático cambio cultural. Pronto emergerá una nueva cultura que estará fundamentada en la obtención de respuestas a través del profundo estudio del cerebro.
En este contexto, la  “Neuroeducación”, como disciplina, pretende obtener el máximo beneficio que nos pueda proporcionar el conocimiento sobre el funcionamiento del cerebro, y aplicarlo en el ámbito de la enseñanza y el aprendizaje. «El conocimiento del funcionamiento cerebral es la clave para poder anclar sobre bases sólidas, y no sobre opiniones, lo que puede ser la enseñanza en el futuro» (Kandel et al., 1997)
Uno de los conocimientos claves que aporta esta nueva disciplina, es que por encima de ser seres racionales, somos seres emocionales. Los estímulos del entorno más próximo son captados por nuestros sentidos, pero es nuestro «cerebro emocional» el que los etiqueta de buenos, malos, agradables, desagradables, etc., antes de ser procesados por nuestro «cerebro racional». Por este motivo solo se puede aprender aquello que nos causa sensaciones gratificantes, o en otras palabras: aquello que amamos.
En la Neuroeducación aún no existe una fórmula o guía que indique los pasos para educar correctamente, pero se están llevando a cabo investigaciones de relevante importancia en  universidades de Cambridge, Harvard, Stanford y otras  orientadas en esta dirección.
Una de las premisas esenciales es que el maestro sea el que consiga hacer emerger la curiosidad de sus estudiantes durante el proceso de enseñanza, ya que la curiosidad como algo innato es la herramienta que permite captar la atención.
Hoy, debido a la cantidad de estímulos que los niños, adolescentes y universitarios perciben de su entorno social, ya no se puede pedir que preste atención sin más. Ésta debe ser evocada, y precisamente la Neurociencia está investigando para saber qué áreas del cerebro se activan cuando se despierta la curiosidad (que no se activa de la misma forma en cada individuo), y cuánto puede durar el foco atencional del estudiante, en función de las diferencias cronológicas, madurativas e individuales (Labos et al., 2008)
La clave parece ser el tipo de estrategias de aprendizaje que se utilizarán integrando todo el cerebro y cómo se enseña por parte del profesor.
Finalmente, debe indicarse que el debate sobre las estrategias no está cerrado y de manera general, siguiendo el camino de la perspectiva de un aprendizaje autorregulado, característica fundamental del estudio universitario y tomando las aportaciones existentes (González-Pienda, 2002; Pintrich y DeGroot, 1990; Weinstein y Mayer, 1986 y Escanero, 2008), se debe continuar contribuyendo al desarrollo de los siguientes grandes grupos de estrategias:
a). Estrategias de autorregulación, integradas por procedimientos de autorregulación que harían posible el acceso consciente a las habilidades empleadas para procesar la información.
b). Estrategias cognitivas encargadas de codificar, almacenar y recuperar la información implicada en el material de estudio.
c). Estrategias motivacionales, que permiten sostener un clima afectivo y emocional positivo en las diferentes situaciones de estudio y que se refieren a las estrategias para enfrentarse a la ansiedad y mantenerse implicado en la actividad de estudio.
d). Estrategias de gestión de recursos, empleadas para optimizar el proceso de aprendizaje gestionando los diferentes recursos disponibles, materiales y personales (tiempo, entorno de estudio o la ayuda de otros).
Referencias Bibliográficas.
Escanero, J. F. (2008). Estilos de Aprendizaje. Zaragoza: Prensas Universitarias.
Escanero, J. F., Soria, M., Escanero, M. E. y Guerra, M. (2013a). Estilos, metacognición y estrategias de aprendizaje en estudiantes de medicina. Una propuesta para la mejora de la enseñanza-aprendizaje. Revista de Farmacología de Chile. 6 (2), 39-47.
Escanero-Marcén, J. F., Soria, M. S., Escanero-Ereza, M. E. y Guerra-Sanchez, M. (2013b). Influencia de los estilos de aprendizaje y la metacognición en el rendimiento académico de los estudiantes de fisiología. Revista de la Fundación Educación Médica. 16 (1), 67-84.
González-Pienda, J. A., Núñez, J. C.; Álvarez, L. y Soler, E. (2002). Estrategias de aprendizaje. Concepto, evaluación e intervención. Madrid: Pirámide.
Kandel, E., Jessell, T. y Schwartz, J. (1997). Neurociencia y Conducta. Madrid: Prentice Hall.
Labos, E., Slachevsky, A., Fuentes, P. y Manes, F. (2008). Tratado de Neuropsicología Clínica. Buenos Aires: Akadia Editorial.
Pintrich, R. R. and DeGroot, E. (1990a). Motivational and Self-Regulated Learning Components of Classroom Academic Performance. Journal of Educational Psychology. Vol. 82. 33-40.
Weinstein, C. E. and Mayer, R. E. (1985). The teaching of learning strategies. In Wittrock, C. (Ed). Handbook of research on teaching. New York: MacMillan.


LOS ANDES  NO CREEN EN DIOS NI EN EL ESTADO

Franz Flores Castro

Una de las mayores incógnitas en estos días debe ser las razones del trabajo minero en las cooperativas. ¿Por qué, pese a la dureza del trabajo en la mina, a lo mal remunerado, los mineros continúan horadando la montaña? ¿Cuál es la causa de que, pese a la evidencia de explotación laboral y recorte de derechos laborales, recién ahora exista un atisbo de sindicalización en las minas?  ¿Por qué, a pesar de que el trabajo en la mina reduce la vida de las personas, continúa atrayendo una gran cantidad de mano de obra?
Una de las respuestas, la más común, es que en las cooperativas existe un grupo de explotadores que se aprovechan del trabajo ajeno, que medran de la necesidad de empleo de gente pobre, (la mayoría de origen rural) y lo usan en su provecho para enriquecerse.  Sin embargo, este asunto puede ser más complejo de lo que a primera vista parece.

En el interesante libro titulado Los ministros del diablo de la antropóloga Pascale Absi se cuenta la historia de Fortunato, un minero cooperativista que, en su juventud llegó a ser uno de los mineros más acaudalados del cerro rico de Potosí pero que con el pasar del tiempo perdió/dilapidó toda su riqueza tanto que ahora se lo puede ver trabajando como curandero adivino.   Lo que interesa saber es ¿Cómo llegó a tener tal riqueza?
Trabajando como minero está claro pero ayudado por un gran golpe de suerte que le hace descubrir un rico filón de estaño, que le cambia la vida por completo, tanto así que era uno de los padrinos más codiciados de promociones de bachillerato, de matrimonio de bautizo y, según señala en su libro Absi “como no sabía qué hacer con su dinero, decidió, empapelar con billetes las paredes de sus casas”.

La clave aquí es que la riqueza de Fortunato no hubiera sido posible como trabajador de la Corporación Minera de Bolivia (COMIBOL), ni como asalariado de una minera privada. En ambos casos igual hubiera recibido su salario y quizás una felicitación de gerencia, nada más. En ese sentido, solo dentro de un esquema cooperativista, el minero puede pensar en hacerse rico, ya que permite la constitución de un minero  “libre”, es decir dueño de un paraje minero, de una bocamina que explota bajo su cuenta y riesgo. En otras palabras, lo que mueve a seguir trabajando al cooperativista es que no lo hace para un tercero sino para si mismo, y lo hace en una labor donde existe la  gran probabilidad de que de que aparezca un grueso filón que lo haga rico. Es cierto que los cooperativistas contratan mano de obra, los llamados “segundas manos”, pero es probable que en ellos también se encuentre la expectativa de ser socios cooperativistas y así soñar con ser ricos algún día. Para ellos, en cierta medida, ser solo trabajadores asalariados es frenar sus posibilidades de ser Fortunatos en algún momento, dejar de lado el objetivo de trabajar su propio paraje minero y de tener la posibilidad de descubrir una veta prodigiosa.
Por supuesto que esta expectativa, esta esperanza, no puede funcionar si a la vez no se considera a la mina, a la montaña (Absi sitúa su trabajo en la mina del cerro rico de Potosí) una entidad viva, una suerte de deidad que se encarga tanto de proveer riqueza como de quitarla. No puede darse sin tomar en cuenta el pacto que el minero entabla con el diablo que, en esta concepción, es el dueño de las vetas, y a quien los mineros hacen ofrendas como “unas hojas de coca, cigarrillos y alcohol, ocasionalmente un feto de llama”.

En suma, el mundo minero es sumamente complejo, no admite una lectura parcializada ya que el juegan aspectos religiosos, sociales, políticos que muchas veces son desconocidos por el estado y que por tanto no puede aplicar políticas públicas efectivas destinadas a este sector. Adolfo Costa Du Rels a propósito de los mineros puso como título de su novela “Los andes no creen en dios” yo creo que tampoco creen en el estado.

jueves, 15 de septiembre de 2016

Diálogos educativos

Juan Carlos Medrano Catorceno


En el hogar como en la escuela se suceden situaciones vivenciales  con alegría, entusiasmo, etc. y a veces otras amargas y angustiosas, ahora compartimos un trocito de una historia que precisamente tiene que ver con las tareas escolares
¿Qué significado educativo tiene la tarea y cual su función formativa?
En opinión del pedagogo: “la tarea es un mecanismo desarrollado en la escuela tradicional que prohíbe la actitud crítica y creativa de los estudiantes hay momentos formativos e instructivos que deben trabajarse en el aula y no así en la casa, porque es en este escenario que se ve y evalúa la evolución y progreso del alumno  en determinados conceptos, habilidades, procedimientos y actitudes, hoy vivimos en el mundo el avance de las tecnologías, allí es donde la tarea resulta siendo un perjuicio para los estudiantes porque se les quita tiempo y espacio para sus actividades de interés personal y social, con la tarea se los mecaniza y se los encierra en una sola mirada cognoscitiva en determinados conceptos y habilidades”.
Desde el punto de vista psicológico: “las tareas hacen estudiantes con poca vida social y cultural en los aspectos emotivo, sentimental y físico biológico, ya que se pasan horas y horas en las aulas y con tareas, memorizando conceptos, procedimientos, habilidades y actitudes que asumen los docentes, hecho que ha producido que el niño se olvide de ser niño y el adolescente se olvide de ser adolescente, ahí viene la secuela de los adultos que quedaron frustrados y sin proyecto de vida”.
Desde la sociología: “las tareas tienen fundamento cuando estas van acompañadas de actividades que los estudiantes pueden y deben hacer en la sociedad, por ejemplo: practicar las relaciones humanas, practicar valores como la solidaridad, el compañerismo, la cooperación, encuentro tolerante, etc. O trabajar ayudando a los papás en los quehaceres de la casa, practicando lo que aprendió en la escuela como conocimientos y saberes que son valorados en la sociedad. Pero lo que ya no podemos permitir es que hagamos tareas para repetir lo que está escrito en los libros o textos, o mecanizarnos con determinados conceptos, reglas, normas o ejercicios hegemónicos”.
Desde la mirada antropológica: “las tareas, no distinguen las diversidades culturales, las diversidades sociales, las diversidades de pensamiento de los estudiantes, la tarea tiene como propósito, homogeneizar la sociedad, sin reconocer la diversidad. Las tareas sirven a un pensamiento homogéneo que lo estamos superando, reconociendo la diversidad. Entonces habría que preguntarse ¿cuánto estamos creando y recreando de nuestras culturas en bien de los estudiantes y de la sociedad? ¿Cuánto de este mundo globalizado actualmente nos sirve para desarrollarnos como pueblos que tenemos nuestra propia identidad y que por años hemos mantenido un sistema de vida más armonioso, más fraterno, más humano, sin dañar a nadie y cuidando de aceptar al otro con sus debilidades y sus fortalezas?”
La escuela de nuestro tiempo tiene el reto: la educación debe servir para hacer felices a los niños y jóvenes de nuestra sociedad, debe servir para aprender a vivir con tolerancia y en la diversidad, para que tengamos nuestra propia identidad, pero ante todo para ser más humanos!!!!.
La discapacidad, más allá de una silla de ruedas http://correodelsur.com/opinion/20160914_la-discapacidad-mas-alla-de-una-silla-de-ruedas.html
Vocaciones verdes

http://www.oei.es/historico/divulgacioncientifica/?Actitudes-cientificas-juveniles-sobre-el-medio-ambiente-Vocaciones-verdes

domingo, 11 de septiembre de 2016

ESTRATEGIAS DE APRENDIZAJE DE LAS MADRES UNIVERSITARIAS

Javier F. Calvo Vásquez
“En el día estoy con mis niñas, sin renegar y sin la preocupación sobre qué voy a estudiar, en ese tiempo solo me dedico a ellas. Una vez que se duermen empiezo a estudiar hasta media noche, pero si estoy muy cansada me duermo temprano para despertar a las tres de la mañana y empezar a estudiar”.
Descansar para María (nombre ficticio) no significa necesariamente ir a dormir, más bien aprovecha el silencio de su cuarto para leer las fotocopias que estuvieron guardadas en su mochila durante todo el día.
Las madres universitarias de San Francisco Xavier casi siempre tienen prisa, casi siempre ingresan al aula cuando el docente ya cerró la puerta y casi siempre también son las primeras en salir de su Facultad. Mientras corre a su cuarto rogando que su hijo o hija no haya despertado, planifica mentalmente la distribución de su tiempo: la merienda de su bebé, recoger las fotocopias, realizar las tareas, hacer dormir a la guagua  y luego estudiar.
Los que tuvimos la suerte de ser estudiantes universitarios sabemos de eso. Cuántas compañeras llegaban a la Facultad cargadas de sus hijos y sosteniendo los textos con la otra mano. Sin embargo, a pesar de esa innegable presencia, ellas no existen como dato estadístico, es decir, son invisibles para la institución de educación superior lo que dificulta el planteamiento de políticas educativas que fomenten la continuidad académica a partir de la enseñanza de estrategias de aprendizaje.
¿Cuántas son? ¿Quiénes son?
Como toda investigación lo más importante es reconocer al sujeto de estudio, en este caso a las madres universitarias (MU), pero no es posible (por ahora) porque no existe un registro que identifique cuántas son, lo que impide conocer su rendimiento académico y las condiciones sociales, económicas y culturales de subsistencia. Al no existir ninguno de estos datos hay que construir un contexto que identifique (en lo posible) a las madres universitarias.
La principal fuente de consulta es Bienestar Estudiantil, repartición que recibe solicitudes para acceder a una beca universitaria, luego las trabajadoras sociales evalúan y de acuerdo a un informe socioeconómico y del kardex académico, se define quién accede a este beneficio. Muchas MU no cuentan con la beca por no cumplir algunos requisitos, generalmente por arrastrar más de una materia o haber perdido el año. De todos modos, el kardex de las postulantes se constituye en un documento valioso que describe las condiciones de vida de las MU.
De la  información proporcionada por esta unidad se destaca que las facultades con mayor número (no se precisa) de MU son: de Ciencias Químico Farmacéuticas y Bioquímicas, además de Enfermería y Obstetricia. Otro dato importante es que en su generalidad son madres “solteras” o abandonadas por el padre de sus hijos, incluso por sus propias familias.
Las guarderías universitarias administradas por la FUL y la facultad de Enfermería, proporcionaron la información más aproximada para conocer el número de MU. Entre ambas registraron este año a 160 niños, de lo que se deduce que oficialmente son 160 madres universitarias de diferentes facultades, digo madres porque el 100 % de quienes inscriben a sus hijos en estos centros son precisamente las madres, desconociéndose la presencia física de los padres, porque según la información suministrada por las administradoras de ambas guarderías, en gran parte de los casos únicamente ellas dejan y recogen a sus hijos.
Ahora la pregunta que interesa saber es ¿cómo estudian estas muchachas? El primer elemento que se desprende del estudio exploratorio llevado a cabo durante junio, julio y agosto en las facultades de Ciencias Químico Farmacéuticas y Bioquímicas y Enfermería en base a la utilización de instrumentos cuantitativos (encuesta) y cualitativos (entrevista), es que las MU estudian casi siempre solas debido a que su tiempo de estudio depende de las necesidades de sus hijos (horario de descanso, salud, alimentación, etc.) y del trabajo (informal) que casi todas tienen. Por tanto, su espacio de estudio se restringe al cuarto donde vive junto a sus hijos.
No obstante, la presencia de sus amigas o compañeras es muy importante, en especial las que no tienen hijos. Son ellas las que colaboran en el cuidado del niño y en el cumplimiento de las prácticas que debe realizar la MU y donde es imposible llevar a sus guaguas. Por tanto, un componente importante en la estrategia de aprendizaje es la solidaridad y colaboración de sus compañeras de estudio.

Resumiendo, se puede asegurar que las MU construyen todos los días estrategias de aprendizaje que no se plasman en papeles o diseños cuidadosamente estructurados, mas se trata de estrategias que imaginariamente definen cómo, cuándo y dónde estudiar. A pesar de las adversas condiciones socioeconómicas y culturales, las MU asumen con mayor responsabilidad sus objetivos académicos, lo que posiblemente no se refleje en sus calificaciones, por eso es necesario que la Universidad visibilice a las MU y establezca la prioridad de crear estrategias de enseñanza y aprendizaje orientadas a lograr la  profesionalización de este sector social.